Arranca el mes de Madrid. Mayo es el mes de sus fiestas y es, sin duda, momento estrella para visitarla y descubrir cómo es capaz de sentirse orgullosamente castiza a la vez que se ha convertido, en los últimos años, en la reina de lo ‘cool’ y lo cosmopolita.

Podría decir que me considero madrileño sin serlo, como tantos que llegamos a la capital antes de que la capital se transforme en casa, algo que esta ciudad consigue como pocas. Por eso, este viernes me gustaría hacerle mi pequeño homenaje y aprovechar para hablarte del que hoy es destino por excelencia para disfrutar de una cocina, restauración y oferta de alojamiento puntera que antes había que descubrir en Nueva York o Londres. La lista de aperturas que puedes leer día a día en Elle es infinita pero me voy a atrever a prepararte una guía express básica para exprimir todo lo que la hace única.

Ya que se nos viene San Isidro, probemos recetas castizas del Madrid de siempre, puestas en valor en clave moderna. Me encanta ver cómo el bocadillo de calamares de la bellísima Plaza Mayor encuentra su reflejo en bares tan sofisticados como el bar Manero, en la calle Claudio Coello, uno de mis ‘spots’ favoritos porque es perfecto para tomar un tapeo muy nuestro en un marco ‘trendy’.

bar manero, de claudio coello, madridpinterest
Manero
Bar Manero de Claudio Coello, Madrid
bocata de calamares, de bar maneropinterest
Manero

Cuando viene alguien de visita, lo recomiendo sin pensarlo, tanto como las zonas tabernarias con solera de Ponzano o el Retiro, de las que tiene la esencia. En esta última adoro, en la misma línea, una de sus novedades: Caiño, el ‘vinobar’ de Carlos García y Lucía Araque con una breve carta de cocina con chispa y excelentes referencias para mojar bien y beber mejor. El bocadillo de calamares contemporáneo de Miguel Carretero en su Santerra Neotaberna, en Ponzano, es otro imprescindible en una ruta que se aderece con unos boquerones en vinagre, unas patatas fritas y una cerveza bien tirada en Fide o en El Doble, un pincho de la espectacular tortilla de Sylkar y termine en Lana, recientísimo asador de referencia con una de las salas más elegantes y bocados ya antológicos como sus mollejas con caviar.

bocadillo de calamares de santerra neotaberna, madrid
Santerra Neotaberna
Bocadillo de calamares de Santerra Neotaberna
tapas de caíno, bar restaurante de madrid
Caíno
Tapas de Caíño

Madrid ama poner al día preparaciones denostadas como la casquería y negocios centenarios que vuelven a la vida. Por eso, no puedo dejar de incluir Lhardy, institución que debería estar en todas las guías después de la renovación en forma y fondo que le ha dado Pescaderías Coruñesas. Si Elizabeth Taylor o la mismísima Isabel II levantaran la cabeza y volvieran a Madrid, volverían a comerse unos callos o un cocido a Lhardy.

salón del restaurante lhardy, madrid
Lhardy
Salón del restaurante Lhardy
el icónico cocido del restaurante lhardy de madrid
JavierPenas
El icónico cocido de Lhardy

Ellas y tantos otros. Tampoco Barrutia y el 9, la taberna por antonomasia de la gente que vive aquí, una casa de comidas que sigue hasta la bandera conectando con las nuevas generaciones en el epicentro de lo ‘chic’ que es Salesas, donde lo mismo te comes unos torreznos de aúpa que descorchas un vino junto a una tabla de quesos franceses en el coqueto wine bar Cuenllas, a tres pasos, o te acodas en la barra y mesas altas de Los 33. Buena suerte, eso sí, encontrando sitio. Si lo consigues, o has sido previsora y has reservado, descubrirás por qué es uno de los bares y restaurantes favoritos de todo el que lo conoce, con el sello en la propiedad de otro ‘top’, Charrúa. Si preguntas a ‘connaisseurs’, te llevarán asimismo a La Parra, que tampoco es habitual en guías. Club inglés decimonónico con esencia y ambientazo de tasca andaluza. No busques más.

sala del restaurante los 33, madrid
Los 33
Sala del restaurante Los 33
torreznos, del bar restaurante barrutia de madrid
Barrutia
Torreznos de Barrutia

Me chifla ver, de igual modo, cómo los mercados de toda la vida siguen activos como nunca con interesantísimas ideas. Mucho más allá del histórico San Miguel, el de Vallehermoso, San Fernando, Antón Martín… Son nombres que me gusta visitar. Que un chef Michelin como Samy Ali cierre su estrellado restaurante para abrir Doppelgänger, en un puesto diminuto del último mencionado, es algo que ocurre en Madrid. Que el equipo de Kitchen 154 o de Tripea, verdaderos referentes, salga de un mercado como el de Vallehermoso, ocurre en Madrid, que es callejera y ‘posh’ a partes iguales.

restaurante tripea, madrid
Tripea
Tripea

Ya te comenté largo y tendido cómo la nueva oleada de jóvenes negocios entre La Latina y Lavapiés (Toga, Tatema, Marmitón…) pone en valor esto con la maestría en cocina de las nuevas generaciones, alejada de formalismos. Nombres de Chueca como Chispa o Comparte ya fueron pioneros en esta línea ‘bistronómica’ que me apasiona y que es necesario que conviva con comedores de relumbrón. Entre estos últimos también te hablé de Saddle, uno de los mejores escaparates del gran lujo, está Desde 1911, templo al producto de mar… Todos sabemos que Madrid es el mejor puerto de España, claro que sí.

restaurante saddle, madrid
Saddle
Restaurante Saddle

Qué joya es el hotel Four Seasons y de qué manera tan espectacular ha recuperado el antiguo Palacio de la Equitativa. O el Edition, entre mis preferidos, imponente vanguardia hotelera que ofrece una amalgama de contrastes en el centro antiguo, en plena Plaza de las Descalzas. Qué belleza la del hotel Santo Mauro y qué bien se come en Gresca y en sus jardines, en el palacete del duque homónimo en el aristocrático Chamberí, vestido por Lorenzo Castillo. Qué grandioso es el Ritz, puesto al día por Mandarin Oriental, con ese imponente restaurante que capitanea Quique Dacosta.

gresca, restaurante del hotel santo mauro de madrid
Santo Mauro
Gresca, restaurante del hotel Santo Mauro
hotel edition, madrid
Hotel Edition
Hotel Edition

Qué templo es el Corral de la Morería, tesoro patrimonial que hay que pisar, al menos, una vez en la vida y que ha alcanzado el hito de la estrella Michelin, primera y única en un tablao flamenco. Qué alegría poder tener la suerte de vivir Madrid, de comerla, de beberla también, que para eso tenemos una de las mejores coctelerías del mundo: el Salmon Guru de mi querido Diego Cabrera, pionero en actualizar el ‘bartending’ del que apenas quedaban ya templos como el fabuloso Bar Cock y al que ahora siguen decenas de animadas propuestas para brindar y bailar diferente como ChinChín. ¡Cómo me gusta contar Madrid!

coctelería chinchín, madrid
Chinchín
Coctelería ChinChín

Corral de la Morería, Madrid
D.R.
Tablao de Corral de la Morería